lunes, 12 de diciembre de 2011

Capitulo 4.

Estaba claro que, fuese verdad o no, lo había escuchado. Aquella maldita frase no dejaba de dar vueltas por mi cabeza. "Se va a vivir a Madrid". Imposible. Estábamos a mitad de curso, ¿no se podía esperar? Estaba claro que tenía que comentar esto con alguien. Pensé en hablarlo con Laia, pero al final decidí no darle importancia. Si era verdad ya me haría la sorprendida en su momento, y si era mentira; pues en mentira se quedaba.
Entonces, mientras estaba yo en mi mundo, alguien puso una hoja en frente de mi. El examen. Un 2,5. Me iba a quedar Lengua Castellana. Por si no tenía ya suficientes cosas rondando por mi mente, ya solo faltaba eso.
Al cambio de clase, volví a salir al pasillo, necesitaba que me diese el aire para poner en orden mi mente. Y, me volvió a parar Carlos. Pero no estaba solo, Alvaro estaba con el.
-¿Que te pasa neni? - dijo Carlos.
-Nada tio; que me va a quedar Castellano, y con esta ya son cuatro.
-A mi no me va a quedar ninguna- soltó Alvaro.
¿Como no le iba a quedar ninguna si suspende todo?
-Já. Ninguna dice, a mi no me engañas-dije.
-Que si, es verdad. Como me voy a Madrid, y voy a dejar el instituto ya no me dan notas ni nada.
PLAS. Así. Sin consideración. En mi cara. ¿Y mi cara? ¿Como me quede? Bien, pensad en la mayor cara de gilipollas que puede poner alguien. ¿La imagináis? Bien; pues ahora añadir 8291839303 caras de gilipollas mas. Así me quede yo.
-Ah.- Fue lo máximo que dije, y solté unas risas.
¿Y para que me reía, si lo único que me apetecía era llorar?
Sin decir nada mas me largué. Así, haciéndome la indiferente, como si no me importase nada que se fuese a Madrid, que estuviese a 6 horas de mi... Seguí avanzando entre la gente.
-Tengo una cosa que contarte, luego ven. - le dije a Laia.
Y entre en la clase, dispuesta a pasar una de las peores horas de mi vida.

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